Milanesa Napolitana

CiberCocinitas, como ya sabéis me encuentro en la Argentina así que pienso que llegó la hora de darle un poco de protagonismo a algunas de sus recetas.

Hoy voy a cocinar el clásico de los jóvenes -aquellos estudiantes que vienen de cualquier rincón del país a estudiar a la gran capital federal- que tienen cómo menú la Milanesa (en lenguaje español: carne rebozada, ya sea pollo o ternera). Pero la diferencia substancial es que aquí muchas veces la cocinan a modo de piza, apoyándola como base de varios alimentos, hoy os presento la Napolitana.

Ellos, los estudiantes, acostumbran a acompañarlo con puré de patatas. Yo –apodada por varios como "La verduritas"- prefiero acompañarla de un salteado de verduras o una ensalada verde para rebajarle la pesadez al plato.

Resultado

Realmente bueno. A mí la carne rebozada me gusta mucho, así que este plato lo encuentro “re rico”.

Tiempo de preparación

15-20 minutos

Ingredientes –para 4 personas-

• 4 milanesas
• 2 tomates
• 150 gr de queso en lonchas -para fundir-
• Orégano
• Aceite
• Sal

Preparación

Una de las cosas que he aprendido aquí, es que muchas veces cocinan la milanesa en el horno. Tan sólo hay que untar los dos lados de la milanesa con un poco de aceite y a temperatura media dejarla 20 minutos al horno. Necesitamos menos aceite lo que quiere decir que es más saludable, y la verdad es que queda rica y muy crujiente. Aún así, yo prefiero fritarla, se necesita un poquito más de aceite pero, a mi gusto, queda más suave y la carne más tierna.

Paso 1: echamos un chorrito de aceite en la sartén, una vez caliente pondremos la milanesa y la doraremos; primero de un lado y luego del otro.

Paso 2: cuando uno de los dos lados ya esté cocinado, le pondremos a éste, el tomate en rodajas y una pizquita de sal. Y encima de éste, pondremos el queso en lonchas de manera que cubra el tomate. Finalmente polvoreamos con un poco de orégano.

Para que el queso se funda bien, y no se nos queme la otra cara de la milanesa, pondremos una tapa durante un par de minutos.

Y... ¡voalá!

Bon profit!/¡Buen provecho!

Como podéis ver; es un plato muy sencillo de cocinar y lo bueno es que se le pueden hacer variaciones para disfrutar de otros sabores.